El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante ... A GRITOS
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                | Davis
                -- Jueves, 29 de Diciembre de 2005 a las 14:45.
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Bastante aburrida. Lo mejor: Michael Gambon y la gran música de Nyman.
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                | Premutos !
                -- Sábado, 27 de Agosto de 2005 a las 22:40.
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Mediocre , arrítmico aunque interesante film de Greenaway ( Entre los más accesibles a su en conjunto desdeñable carrera ). Sin duda, la gracia de este film radica en un original pretensión dadaísta-deconstructivista . Su final no obstante es una reconversión al cénit de un teatro jacobino del siglo XIX , enervado por la sucia atomósfera de una escenografía rica en detalles sumo pictoricos y (auto)referencias metasublimadas que aunan/subrayan la reiteración complaciente de la trama/descripción ( los lienzos "La ultima cena " ) , harto barroca en referente a términos estético-ideológicos , la arquitectura de Boullé enfatiza la emocialidad contenido-forma-metáfora que implora en suma a una segmentación artística , por fín cósmica al perpretar tres artes conjugados/fusinados por el lente , terminando en una puesta en escena puramente teatral , el eclecticismo extra-artístico nos revierte a una mayor y más pretencioso analisis de en este caso la vertebración imperial de un hegemonata , sus avatares , la consumacíón completa de su dominio , su personal alienado bajo una coartada legal y por fín su descenso en una rebelión . El continente-contenido original que ofrece nos personifica mejor sus ambiciones , en especial por su planificación simple pero efectiva ( división por días , " Menú de la ocasión " ) : comer , follar , acaparar y disfrazar conversaciones banales en formulas de plena tecnificación ( inventadas , con alusiones históricas , a comidas , etc ) Ahora bien , su mala resolución visual , la excesiva dilatación y su por veces carente sentido de la proporción , resultando por momentos de un empalagoso y desaforado cumulo de gastrointeritis intelectual liman los aciertos de manera bastante considerable . No obstante , merece la pena verla , siempre y cuando se atengan a las provocaciones incisivas de la cinta .
 
 
  
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